Sin mayores inconvenientes se puede pisar o hacer vida cotidiana mientras se pule el suelo, ya que el proceso no requiere de la aplicación de productos químicos ni se desprenden sustancias con efecto de toxicidad. Para la realización del trabajo sólo usamos la maquinaria abrasiva diamantada y agua, por lo que salvo el material resultante del pulido, no se desprenderá ninguna otra materia a la medio ambiente o al entorno en que se encuentre el suelo.
Sobra decir que una vez terminado dicho proceso, se podrá reacomodar el lugar y volver a hacer una vida normal de forma inmediata.